Armas, camisas de fuerza, ataúdes, candados y cadenas eran algunos de los aparejos favoritos de Houdini a la hora de subir al escenario. Pero, el hombre que llegó a Hollywood con sus magias inexplicables no siempre tuvo una vida glamurosa.
Según registros históricos, el mago nació como Ehrich Weisz, en 1874, en Budapest, en Hungría. Era el hijo de un rabino, que acabó mudándose con su familia a los Estados Unidos en busca de mejores oportunidades de trabajo.
En esa época, con tan sólo 9 años, el entonces Ehrich ayudaba en los gastos como podía con su pequeño salario de lustrador de zapatos. Pero pasó mucho tiempo para el chico se interesara en la carrera artística, y pronto se empezó a presentar como el “Príncipe de los Aires”, en pequeños espectáculos como trapecista.
A los 12 años – nadie sabe explicar el por qué, pero Harry se escapó de casa y pasó un año lejos de sus padres – él y su hermano Theo comenzaron a seguir por los caminos del ilusionismo. Fue ahí que surgió el nombre artístico de Harry Houdini, inspirado en el nombre del mago Robert Houdini, de quien era fan.
A los 17 años, ya con su nombre siendo conocido en Nueva York, Harry se fue definitivamente de casa para hacer sus espectáculos. Pero después de eso, el ilusionista acabó casándose y entrando en un circo, donde pudo perfeccionar sus trucos y conocer buena parte de los Estados Unidos.
Las presentaciones “imposibles” de Houdini se volvieron tan conocidas y aclamadas, que fue a hacer su propio show. En esa época él se libraba de esposas, escapaba de celda en donde lo habían metido encadenado y así sucesivamente. Durante una temporada en Europa se incluyeron camisas de fuerza en sus números.
Harry Houdini se convirtió en un fenómeno en el medio artístico y llegó hasta a ganar hasta una estrella en el Paseo de la Fama. Pero su éxito fue corto, ya que murió a los 52 años de edad.
Se desmayó en medio de un concierto y fue llevado al médico, que le descubrió una apendicitis aguda. Pero Harry se negó a pasar por la cirugía de emergencia. Al día siguiente, ya en medio de un intenso dolor, la operación fue realizada, pero era demasiado tarde para salvarlo.
Según cuentan, Houdini ya presentaba malestar abdominal desde hace 2 semanas, después de que llevó una serie de golpes en el vientre propinados por un estudiante. El joven había desafiado al mago, con el fin de saber si era realmente tan resistente a los golpes como predicaba y, sin esperar a que Harry se preparara, golpeó su vientre 4 veces.
El diagnóstico final de Houdini decía que había fallecido a causa de una peritonitis. La inflamación, que se propagó por la membrana que cubre la pared abdominal y las vísceras del mago, fue tanta que rompió su apéndice.
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